Mi gato asesor en modo resiliencia
- Le pregunto a Celso Peteco Furtado de la Vega y Peña ¿cuánto necesita, joven economista Gato, la economía Boliviana para llegar a fin de año sin sobresaltos?
- Con la sabiduría que solo da la juventud me responde: una buena proxi pueden ser los 2700 millones de dólares que aproximadamente hay en reservas de oro y que el gobierno quiere disponer.
- En caso de que no se apruebe la Ley del oro, qué alternativas de financiamiento se tienen, joven gatuno?
- Todo indica que el gobierno está ganando tiempo con todas estas políticas económicas parche, me responde el joven felino, seguramente estará más aliviado de fondos o recursos internos, cuando la gestora pública se haga cargo de las AFP y podrá tener acceso a más de 23.000 millones de dólares, que están en Bolivianos (7000 ya son deuda interna y 16000 están aplicados en el sector financiero local e internacional). Pero igual no faltan divisas.
- Para tener divisas sus alternativas son las siguientes.
a) Soltar las pichicas ideológicas y pedir plata prestada al Fondo Monetario Internacional FMI. Poco probable. Su antiimperialismo de aracas no les permite.
b) Vender bonos del Tesoro por 2000 millones de dólares, asi lo estableció el presupuesto general de la nación 2023, a los mercados privados. Esta plata está muy cara. Con suerte conseguirán una tasa de interés del 13 % al año. Puede que una vez que estén a cargo de los recursos de las AFP, saquen este dinero al exterior y hagan esa compra. Ya lo hicieron anteriormente. Esto sería bueno para los pensionistas, subiría la rentabilidad, pero malo para el país.
c) Una otra alternativa es monetizar los ingresos futuros del Lito. Dado que se dice que obtendremos en cuatro años 5000 millones de dólares por año de la exportación de litio, puedes pedirle que los chinos te adelanten unos 2500 millones de dólares. En este caso habrá que ver cuáles son las condiciones y tasas de interés. Aquí te amarras definitivamente a los chinos, pero la necesidad tiene cara de hereje. - Me dicen en los tejados del barrio que se debería reajustar el precio de la gasolina. No estoy muy de acuerdo con esa medida que, en este caso, sería social y políticamente muy compleja, me dice Celso Peteco lamiéndose las garras. Sin embargo, puede ayudar con recursos en bolivianos, pero Seguirá faltando dólares. Así que pechito de bronce y modo resiliencia, humano amigo.