El Gobierno aprueba 6.900 millones para el PERTE del hidrógeno verde, las renovables y el almacenamiento de energía
El Gobierno aprueba 6.900 millones para el PERTE del hidrógeno verde, las renovables y el almacenamiento de energía.
14 de diciembre de 2021

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) para el desarrollo del hidrógeno verde, las tecnologías vinculadas a las energías renovables y el almacenamiento. Serán, en total, 16.300 millones de euros los que se movilizarán para “construir una transición energética diseñada y hecha en España”: 6.900 millones de dinero público aportado por el Gobierno central —gracias al impulso de los fondos europeos— y, en menor medida, por las comunidades autónomas; y 9.500 millones de inversión privada.

El objetivo de este plan es el desarrollo de “tecnología, conocimiento, capacidades industriales y modelos de negocio” vinculados al auge de la energía limpia, y el Ministerio para la Transición Ecológica espera que los proyectos vinculados a este PERTE —el tercero puesto en marcha por el Gobierno para ser desarrollado con fondos europeos— se traduzca en la creación de 280.000 empleos entre “directos, indirectos e inducidos”. El impacto sobre el PIB está cuantificado en más de 12.000 millones de euros.

España, subraya el documento presentado este martes, es una “potencia mundial” en renovables, y cuenta con el mayor recurso solar del Viejo Continente y uno de los mejores recursos eólicos. Esa posición envidiable a escala continental le sitúa, a su vez, en una situación “privilegiada” para avanzar en tecnologías “en fase de desarrollo”, como el hidrógeno renovable o el almacenamiento o las tecnologías marinas flotantes. El PERTE tiene exactamente ese objetivo: desarrollar esas tecnologías incipientes para avanzar más rápido en la descarbonización e impulsar el empleo y el PIB.

El hidrógeno es la “prioridad” del plan —tanto es así que el Ejecutivo habla de “proyecto país” para referirse a él— y absorberá por sí solo 1.555 millones de dinero público, a los que el ministerio espera sumar otros 2.800 millones de capital privado. Se subvencionarán las aplicaciones de este gas en el transporte pesado —de embarcaciones a ferrocarriles, camiones y autobuses—, así como proyectos de electrolizadores de gran escala, relacionados con usos industriales locales y aplicaciones comerciales. También se impulsarán los clústeres de hidrógeno renovable, ligados a los actuales puntos de consumo de hidrógeno de origen fósil, para sustituirlo por aquel generado a partir de energía libre de emisiones.

“Necesitamos reducir nuestra dependencia del exterior en combustibles sin incrementar la dependencia tecnológica, sino consolidar nuestras propias capacidades. A eso se enfoca este PERTE”, ha explicado la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. “Queremos consolidar e incrementar nuestra posición como referente tecnológico en la producción y el aprovechamiento de hidrógeno”, ha agregado. El objetivo del Ejecutivo, dice, es que España aporte al menos el 10% del hidrógeno renovable que tiene la Comisión Europea en su hoja de ruta para 2030.